(cheun rume)

 

20131105

La leyenda de las cuatro hermanas.

Cada atardecer, cuatro ancianas hermanas bajaban a la playa. Sus figuras encorvadas se turnaban para transportar los leños con los que encendían, cada atardecer, una vistosa fogata. Los habitantes de la caleta cercana las tildaban de brujas y les otorgaban misteriosos poderes. La menor de las hermanas, decían, poseía el don de convocar la oscuridad durante los días claros. La segunda hermana poseía la habilidad de, aprovechando la oscuridad, sembrar la duda entre los hombres. Desde la duda y el caos, la tercera hermana construía el conflicto y la inquina. Sin embargo, era la mayor de las hermanas la más poderosa y misteriosa. Le apodaban Lapeyüm, que significa "la causa de la muerte", pues, se decía, podía juzgar a los justos como falsos y a los falsos como justos para embarcarlos hacia el olvido. Se distinguía además de sus hermanas por su blanca y larga cabellera. Decían los hombres ancianos de la caleta que las hermanas hablaban de manera alternada, complementando una lo que la otra decía, como si fuesen una única mente con distintas bocas. A pesar de esto, la mayor jamás pronunciaba palabra alguna. Aseguraban que una única vez se le escuchó y sólo provocada por la espada de un viajero vestido de acero.

Eran pocos los osados que se atrevían a husmear por aquella playa al atardecer. Esto daba pie a que existiesen distintas versiones sobre el origen y motivos de las cuatro hermanas. De cualquier forma, lo cierto era, y esto saltaba a la vista decían en el poblado, que las hermanas bajaban cada atardecer a la playa y encendían un luminoso fuego. Si bien todos en la caleta recordaban alguna vez al menos haberlas visto salir de los espesos bosques y caminar lentamente hacia la playa, nadie tenía memoria de haberlas visto internarse nuevamente en la selva cuando se extinguía el fuego. Pudiere ser, naturalmente, que la noche impidiera hacerlo. Pero, los años pasaban y pasaban, y nunca nadie las vio volver a los bosques. Por el contrario, algunos imprudentes pescadores que lanzaban sus redes hasta después de caer el sol, aseguraban que cuando el fuego se extinguía, cuatro ballenas, una de ellas blanca y jorobada, nadaban siempre en dirección a la isla frente a las costas de la caleta.

La isla estaba cubierta por una espesa vegetación. Desde la costa se le veía como una pequeña cordillera, cubierta de un profundo verde. Un verde que muchas veces se confundía en pleno día por negro. Al rededor de toda la isla se extendía una playa de arenas y piedras blancas y grises. Daba la impresión de que el frío de las mañanas de invierno emanaba todo desde las arenas de la isla. Hacia el norte, el pálido paisaje era mucho más amplio y daba espacio a un roquerío que albergaba un pequeño muelle para las embarcaciones que visitaban la isla desde el continente. Existían en esta zona un pequeño poblado, gemelo por así decirlo de la caleta en el continente. Los habitantes de la isla eran en todo sentido iguales a sus vecinos, salvo en cierto aspecto espectral que parecía conferirles su entorno.

No era solamente la palidez de sus rostros que reflejaba el gris de las piedras de la playa. Existía algo más en esas miradas casi inexpresivas, casi inhertes, que saludaban al viajero con una frialdad que tocaba los huesos. Desde el continente, la isla se veía todas las mañanas, durante todo el año, cubierta por una espesa niebla blanca. Ésta sólo disipaba con el sol de mediodía y gracias al fuerte viento que llegaba desde el sur. Existía además una antigua creencia que las almas, al morir los cuerpos, abandonaban esas costas para dirigirse hacia un país más allá del mar hacia el oeste. Así, los isleños eran quienes más cerca estaban del país de las almas y por tanto los apodaban como los hombres del oeste. Detenidos por esta superstición, eran pocos los habitantes de la caleta que se aventuraban libremente en la isla. No era menester de los vivos, decían, interrumpir las labores de quienes se disponen a partir de estas tierras.

Pasaron muchos años, casi incontables, y las hermanas no fallaron nunca en encender sus fogatas. Todas las noches se las veía bajar a la playa con los leños y, pacientemente, encender fuego sobre la arena blanca. En la isla, los hombres y mujeres mantuvieron todo ese tiempo su gélida distancia con los habitantes del continente. Así fue todas las tardes hasta que un día, desde el norte, un grupo extraño vino a interrumpir su ritual. "¡Tambor, tambor! El rey llegó" - exclamó una de las hermanas al escucharlos venir. Vestían relucientes armaduras y portaban armas nunca antes vistas en esas tierras. Las hermanas menores danzaban al rededor del fuego que aún no terminaba de encender, mientras la mayor observaba en silencio desde un alto. El líder de la expedición, al verlas y sorprendido por su extraño aspecto las inquirió: "¡Hablad si podéis! ¡Decidnos qué sois". A lo que las hermanas replicaron una después de la otra: "¡Salve Conquistador! ¡Hidalgo de la Nueva Villa!", "¡Salve Fundador! ¡Gobernador de la Concepción!", "¡Salve Siervo! ¡Tú que llegaste para reinar!"

La comitiva quedó estupefacta ante estas palabras. Una mezcla de temor y asombro se reflejó en sus rostros endurecidos por el largo viaje. Sólo la mayor de las hermanas parecía no tener expresión alguna y observaba desde el claroscuro que el fuego y la niebla creaban, sin decir palabra. Uno de los soldados, movido quizás por la curiosidad, pero sobre todo por una altanera imprudencia la inquirió:

"En el nombre de la verdad, hablad, ¿sois vosotras fantasía o reales como os presentáis? A mi noble compañero saludáis por su título y auguráis un futuro real que pareciere dejarlo sin aliento. A mí sin embargo no me habláis. Habladme, si podéis ver en las semillas del tiempo y revelar qué grano crecerá, que no temo vuestro odio ni anhelo vuestros favores."

Pero en este punto la historia dio un vuelco. Las hermanas ignoraron al segundo hombre para centrarse en un muchacho que apenas sobrepasaba los once años de edad. Era éste un mocito granado, con una gallarda figura para su escasa edad y, si bien viajaba como sirviente, tenía una mirada viva, aguerrida y belicosa. Su moreno torso desnudo contrastaba con las brillantes armaduras de sus amos como el día con la noche. A él se dirigieron las tres hermanas esta vez, sin reparar en los demás miembros de la delegación.

"¡Salve!", dijo la primera, "¡Salve!", prosiguió su hermana y "¡Salve! Pequeño Halcón Veloz" terminó la tercera. "Inferior al Conquistador, pero aún más grande". "No tan dichoso, pero aún más". "Tú que engendrarás hombres libres, pero no lo serás". Y luego las tres hermanas al unísono exclamaron "Así ¡salve al Conquistador y salve al Libertador!", "¡Salve Valdivia y Leftraru, Salve!".

Lleno de ira por tal desagravio, el soldado no contuvo su cólera y desenfundó su espada. Con ella se abalanzó sobre la mayor de las hermanas y la forzó violentamente al suelo con la hoja sedienta en la garganta. "¿Vos no tenéis nada que decir?" - le gritaba fuera de sí. La mayor de las hermanas explotó en una siniestra carcajada y habló por vez primera:

"Hasta el gavilán está harto de graznar por vuestra fatídica entrada en mis dominios. Ha mucho tiempo que los espíritus que sirven a la muerte me despojaron, si es que alguna vez lo tuve, de mi sexo; me llenaron desde la blanca corona hasta mis endurecidos pies de la crueldad más desesperada; hicieron mi sangre espesa para impedir cualquier acceso y pasaje al remordimiento y a cualquier indicio sentimental que pudiere entrometerse entre mi designio y su consecuencia. Ha mucho tiempo que Heraldos Negros visitaron mis pechos para cambiar la leche por hiel; que la noche espesa vino a cubrirme con la negra niebla del infierno para que mi puñal no vea la herida que hace ni vengan desde los cielos tontos piadosos a intentar detenerme."

"¿Y tú me amenazas? Tú, miserable. Tú, que crees que puedes construir un destino cuando ya todo fue predicho. Tú, que no sabes que yo nací un día que Dios estuvo enfermo. Tú debieres temblar en esta hora funesta. No sólo por tu presente, sino por todos los presentes que serán. Porque no habrá de llegar un tiempo donde los hombres dejen de llorar mi nombre. Ni habrá de llegar tampoco un día que yo no pueda transformar en noche. Porque su vida, no es sino un pretexto para mi gloria. Porque está escrito desde el comiezo que todo cuanto es, lo es para perecer. Y todo lo que nace comienza a morir."

"Morirás tú y tus compañeros, sin importar cuán grandes sean sus obras. Morirá el Conquistador en manos del Conquistado, cuando por la garganta del sádico baje el oro que tanto buscó. Dos veces morirá también la Ciudad Mártir a manos del muchacho que apenas ves. Y será esta misma ciudad de la Concepción, maldita por su nombre blasfemo, fruto de la codicia y la sangre, el escenario de cientos y miles de tragedias. Desde esta isla que ves frente a nosotras partirán los corsarios a saquearla y arrazarla. Y cuando no hayan más corsarios, será la tierra misma la que yo tome por instrumento. Será el mar de aquella bahía calma el que deje sin vida a los hombres. Y seré yo cada vez que alguien llore por su hermano, la que ría."

"Y lucharán contra mí en vano. Se llevarán a las almas desde este purgatorio al valle bajo el Caracol buscando una desesperada redención. Refundarán su ciudad entre los muertos, en la ciénega que formó el ocaso del gran río. Lucharán entre ustedes una vez más, cuando sus linajes ya se hayan confundido eternamente y sean víctimas y victimarios todos hacedores de mi oráculo. Cuando se escuchen en estas tierras un grito ahogado de libertad, ahí estaré yo para señalarles la pequeñez de sus días. Cuando digan 'allá va la muerte, me está esperando', ahí viviré yo, cuando ustedes mueran uno a uno, o todos de una vez."

"Ahí estaré yo cuando Ismael navegue por estas aguas. Cuando intente, como tú miserable, amenazarme con su arpón frenético. Ahí estaré yo riendo de su imprudencia, de su ceguera, de su obstinada demencia, de su inconsciencia enferma. Porque si Dios lo perdonó a él, a su padre o a su hermano, fui yo quién desoyó el mandato de los cielos para arrastrarlo al olvido. A él, a toda su nación, la de su hermano y la de todos los hijos de Abraham."

"Porque, ¿qué son ustedes si no el escenario del vacío? ¿Qué son ustedes si no la causa de muerte? ¿Qué son sus vidas si no el santuario del dolor? Bien se les llamó a habitar un valle de lágrimas. Porque es una tragedia sin consuelo el ser que ya no es. El ser que es siempre sólo un estar. El ser que siempre apenas estuvo."

"Ni siquiera cuando los siglos les den alas podrán escapar de mi promesa. Yacerán en estas aguas sus cuerpos olvidados, los justos por falsos y los falsos por justos, porque así lo designo yo, a pesar de su triste oposición. Quienes vuelen sobre estas aguas sabrán también que su último dolor es todo cuanto hay. Y lo sabrán a la par sus hermanos y amigos, sus madres y amadas, sus hijos y nietos. Que vivir es siempre morir y la muerte, la verdadera vida."

Una intensa pero fría luz emanaba de la mayor cuando terminó de decir estas palabras. La cegadora claridad de su cuerpo blanco cubría la playa opacando incluso la fogata que todas las tardes prendieron. El frío se apoderaba de los corazones de los invasores y ahogaba a las brasas. La mujer se levantó lentamente mientras el joven español temblaba de miedo y dejaba caer su espada. El sonido del metal sobre la piedra no se escuchó pues el mundo parecía en pausa ante la sobrecojedora presencia de la bruja. El negro de sus pupilas la abandonó como un oscuro humo que flotó hasta entrar en los ojos del arrogante muchacho. Todos los miembros de la expedición vieron cómo la vida del soldado se escapaba y las pupilas de la bruja se tornaban amarillas como el oro. Cuando su cuerpo cayó pesadamente sobre las rocas, las mujeres ya se habían desvanecido para siempre de esas costas. La intensa luz que cubría todo desapareció instantáneamente dejando tras de sí sólo un frío espectral, la oscuridad y el eco de la armadura del soldado al golpear contra las rocas.

En la caleta dicen que después de esto nunca se volvió a ver las hermanas. Pero que a veces, cuando la luna se acerca demasiado a la tierra y colma el cielo claro con su frío rostro, se puede ver en la isla una fogata que marca la ruta de cuatro ballenas que llevan a las almas hacia el oeste. Todavía hoy algunas viejas supersticiosas del poblado guardan la esperanza vana de que San Nicolás de Tolentino consuele a los muertos que aguardan en el purgatorio de Isla Mocha.

20130418

Frühjarsmüdichkeit.

Todos íbamos a ser líderes
del verídico mandar
y tomamos por verdad
que llegaríamos al mar.

Pero eso era en invierno,
ahora la primavera comenzó
y el sueño pitagórico
se diluyó en sudor.

Creo en Pitágoras todo poderoso
La nieve se derrite entre tus dedos
Creador del Cielo y de la Tierra
Todos íbamos a ser líderes

Creo en Jesucristo su único hijo
El verano ebulle en tus poros
y nuestro Señor
del verídico reinar.

20130403

Álgebra

EL ÁLGEBRA TERMINÓ CONMIGO

Yo no digo que ponga fin a nada
No me hago ilusiones al respecto
Yo quería seguir algebraizando
Pero se terminó la inspiración.
El álgebra se ha portado bien
Yo me he portado horriblemente mal.

Qué gano con decir
Yo me he portado bien
El álgebra se ha portado mal
Cuando saben que yo soy el culpable.
¡Está bien que me pase por imbécil!

El álgebra se ha portado bien
Yo me he portado horriblemente mal
El álgebra terminó conmigo.

NPS


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El álgebra me traicionó con la poesía
Se fugaron las dos con una sonrisa abierta
Levantaron un monumento en Lesbos
para burlarse de mi sobreyectividad
Al álgebra le causa risa mi retórica ensoñación
y a la poesía esa demostración conveniente
de la asociatividad del cuerpo en el espacio.
El álgebra se fue con la poesía
y a mí me dejaron debajo de un montón de hojas
La poesía conquistó al álgebra
y no quedó por estos lados más que un recuerdo afín.

20121013

Vergangene Zeiten

Vergangene Zeiten sind immer gegenwärtig.


Durante el tiempo que pasé en Alemania (agosto 2006 - julio 2007), hice algunos viajes. Todos ellos fueron registrados en autoadhesivos. Cada uno costaba entre 3 y 5 euros, porque en Europa todo es innecesariamente caro. En, aproximadamente, abril del 2007 tuve que comprar un notebook alemán porque el mío sufrió un lamentable accidente que no voy a detallar. Hasta esta semana, cuando me llegó el nuevo juguete que estoy estrenando, fue este notebook germanoparlante el que me acompañó en todos mis proyectos. Estos incluyen, pero no se limitan a, terminar la U, viajar varios kilómetros, escribir algunas tonteras y leer otras, sobrevivir un terremoto (con su respectiva caída libre), soportar en terreno el calor y hollín de una caldera en mal estado, comenzar la U de nuevo, viajar varios kilómetros más, escribir algunos programitas entretenidos, como un ajedrez para jugar online, una interfaz para un brazo robótico que hablaba como Homero, y conquistar el mundo. Como herencia de su predecesor, recibió parte de los autoadhesivos que se ven en la imagen, los cuales tuvieron que ser despegados del notebook primordial, mientras que otros los ganó por méritos propios. Hoy día, los autoadhesivos están muy adheridos a la realidad como para despegarlos y heredarlos nuevamente, por lo que paso a describirlos de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo:

1.- POLSKA. Polonia. Autoadhesivo comprado en Cracovia, Polonia, entre pascua y año nuevo de 2006. Lo compré en una tienda de suvenirs cerca de la plaza importante de la ciudad. También vendían camisetas, sobretodos y banderas resagadas del mundial de fútbol de ese mismo año. Cada vez que viajaba a alguna parte, compraba un sticker para mí y un llavero para mi hermana. Si mal no recuerdo, la compra fue el mismo día en que fuimos a unas minas de sal cerca de la ciudad...

2.- FRANCE. Francia. Lo compré en París a un costado de Notre Dame. Esto debió ser el cinco o seis de julio del dosmilsiete. El siete de julio del dosmilsiete, lo pasamos conversando con la Gioconda en el Louvre. Lamentablemente no nos quedamos hasta el catorce para que estos franceses me celebrarn el cumpleaños con un desfile. Hasta la fecha, este viaje ha sido lo más gay que he hecho en mi vida. Fui con un amigo a París por el fin de semana y dormimos en un hotel en camas pegadas porque era más barato. Fuimos en tren y a la vuelta tuvimos que pasar por Colonia, donde se desarrollaba la Gay Parade más grande de Europa.

3.- UdeC. Por el desarrollo libre del espíritu. A la vuelta del viaje europeo, estando ya en Conce dedicado a terminar la carrera de una buena vez, sentí la infinita necesidad de tener un escudo de Conce pegado en el notebook. No encontré. Pero en una tienda de la galería del Foro encontré un sticker de la UdeC que tuve que recortar para dejarlo como se ve. Hoy volví a buscar stickers del escudo de Conce, pero tampoco encontré... lo único que pillé fue uno del equipo de la UdeC que está feo, pero igual lo compré.

4.- Irlanda. Give Ireland back to the Irish. Fuimos a Dublín, Irlanda, en junio del 2006 con el mismo amigo con el que posteriormente fuimos a París. Fue un viaje bonito. Fuimos en avión hasta Liverpool en Inglaterra, viajamos a un puerto en Gales cuyo nombre no recuerdo y tomamos un ferry para llegar a Dublín. No recuerdo dónde compré el sticker, me parece quen una de las avenidas principales que dan hacia la parte nueva de la ciudad. No en los barrios tradicionales como el Temple Bar. Lo que sí recuerdo, es que llovía como en buen verano bretón y que mis zapatillas que tenían un hoyito murieron rápidamente. Tuve que comprarme unas zapatillas por 3 euros en un lugar de cosas usadas, porque no tenía más dinero. Me lo había gastado todo en Liverpool comprando cosas de los Beatles.

5.- Catalunya. Tengo un par de amigos en Barcelona y, como la ciudad es bastante bonita, tuve que ir a saludar. Nadie me quiso acompañar, así que fui solo. Lo bueno de viajar solo, es que no hay que depender de los gustos e intransigencias de otras personas como me pasó después en Londrés ni de la lentitud de la gente a la que le gusta mirar todos los rincones de unas piedras de hace cinco siglos. Caminé mucho en ese viaje. Aterricé en Gerona, porque era más barato el pasaje, y recorrí esa ciudad toda la tarde. Después tomé un tren hacia BCN que hizo el viaje de media hora en tres. En el Paseo de Gracia me encontré con mis amigos y fuimos a recorrer la ciudad de noche. Cenamos ese exotismo culinario catalán ques el pan con tomate (en serio) y luego, frente a la Generalitát, hicimos un rito de independencia, por lo que no sé qué alegan tanto por estos días estos catalanes. Catalunya es un país independiente desde 2006 cuando yo, por el poder que me otorgo yo mismo, la declaré como tal sin que corriera ninguna gota de sangre. El autoadhesivo lo compré en un kiosko de Las Ramblas. Estuve harto rato buscando uno con la bandera independentista de Catalunya, con la estrella sobre un triángulo azul, pero no pillé, así que compré ésta.

6.- Me verás volver. Soda Stéreo. Cuando Cerati todavía se acordaba de cómo respirar, se les ocurrió en 2007 celebrar los 10 años de separación de Soda con una serie de conciertos de reunión. Paradójico. Como a mi hermana y a mí siempre nos ha gustado Soda y yo tenía un poco de plata que sobraba, compré las entradas para ir al concierto que ocurrió un par de meses después de que yo llegué de vuelta a Conce. Viajamos con mi hermana en bus desde Conce hacia Chile una noche y estuvimos toda la tarde parados en el estadio nacional. Había muchísima gente y se estaba a empezando a volver complicada la cosa en la cancha. Hacía mucho calor y ya no nos quedaba agua. Además estábamos muy apretados. En ese apretamiento de gente compré el autoadhesivo. Finalmente tuvimos que arrancar de la muy buena posición en la que estábamos y retroceder para salvar nuestras vidas.

7.- LUXEMBOURG. Luxemburgo, como su nombre lo indica, la verdadera ciudad luz. La ciudad consiste en un castillo medieval arriba de un cerro donde se habla alemán chisporreado con francés, pero, por orgullo nacional de este principado que obtuvo su autonomía como ciudad estado para separar a Francia y a Alemania después de la guerra, ellos dicen ques un idioma nuevo que se llama, naturalmente, luxemburgués. La verdad es que una ciudad así es el sueño de cualquiera que haya leído el Señor de los Anillos y, no por nada, dicen que tienen el mayor ingreso per cápita de Europa. Fuimos con varios amigos un fin de semana. No recuerdo exactamente dónde compré el sticker.

8.- THE BEATLES. Londres. Compré este sticker en una de esas típicas tiendas para turistas que están por todos lados en Londres. No me acuerdo cómo se llaman. Pero venden todo tipo de suvenir cliché de inglaterra y están en todos lados. Entre todas esas cosas clichés, había un stickers de los Beatles y, naturalmente, éste fue el primero de la colección de stickers y por eso está en medio de todos. En ese viaje también fuimos a Oxford y a Windsor. Muchísimo para haberlo hecho sólo en tres días. También pasamos por Abbey Road, por supuesto, lo cual fue por lejos lo mejor del viaje. Todo lo demás fue estresante, desde que una amiga con la que íbamos perdió el avión porque se quedó dormida, hasta que al final la quería matar porque no se callaba nunca y quería ir a los lugares más irrelevantes de la ciudad (como el Hard Rock Café...). Dejamos de hablarnos durante un buen tiempo después de ese viaje.

9.- SAMSUNG. La marca del notebook. R40 el modelo. Intel Celeron M. 256M RAM, 80G HD. (Notar lo mucho que hice sobrevivir a ese hardware...)

10.- KÖLN. Colonia, Alemania. Una de las ciudades más hermosas de Alemania, a la que fui muchas veces. Recuerdo particularmente el viaje para el Carnaval... La catedral de Colonia es una de las obras arquitectónicas más importantes del barroco gótico y una de las más grandes. Es bonita, a pesar de ser una iglesia. Pero sigo pensando que la única iglesia que vale la pena visitar es la Sagrada Familia de Gaudí en Barcelona. No tengo idea en qué momento, viaje o circunstancia, compré el escudo. Puede ser que lo haya comprado en una tienda cerca de la Catedral, que está al lado de la estación de trenes y de la Gay Parade. Es el único sticker de Alemania que hay pegado en el Notebook. Tenía uno de Berlín también, pero era muy grande y se lo regalé a un amigo acá en Chile.

11.- SLOVENSKO. Eslovaquia, cuya capital, Bratislava, la ciudad más penca de Europa. Nunca vaya a Bratislava, no hay nada que ver ahí. Hicimos un tour con varios amigos que recorrió, las últimas dos semanas del 2006, diversas ciudades de Europa del Este. Bratislava quedaba en el camino... Compré el autoadhesivo en un castillo que está arriba de un cerro. Domina la ciudad y es el símbolo no sólo de la ciudad, sino del país completo. Eslovaquia fue parte de Checoslovaquia durante la época del dominio comunista sobre Europa, pero hoy día es un orgulloso país independiente. Nadie sabe por qué. Lo más triste de todo, es que pasamos navidad en ese pueblo olvidado de dios en una pocilga donde nos estábamos alojando. Lo único bueno es que está a 45 minutos de:

12.- VIENNA. Wien, Österreich. No encontré stickers que tuvieran el nombre en alemán, así que me tuve que conformar con éste que lo tiene en, según dijo la austriaca que me lo vendió, italiano. También le compré un mapa de la ciudad que está pegado en mi pared desde que volví. Bonito el mapa, pero más bonita la ciudad. Pasamos el 25 de diciembre en Viena, arrancando de Bratislava, con un día soleado hermoso y todo nevado a nuestro al rededor. Compré el sticker y el mapa en un negocito en una de las callecitas que desemboca en la Catedral de la ciudad. En ese mismo sector están la escuela de Mozart, la casa de Beethoven y de todo el resto de los músicos del mundo.

13.- Brasil. En 2009 tuve que desarrollar un proyecto de tesis para terminar mi carrera de Ingeniería Civil Electrónica. Fui a hablar con un profe y entre la lista de temas que tenía, me gustó uno porque era absolutamente teórico y no tenía ninguna relación con la realidad. Cuando le comenté al profe me dijo que ese proyecto posiblemente tenía fondos para un viaje a Brasil... En agosto y septiembre de 2009 estuve en la Universidad Estadual de Campinas, Sao Paulo. En un principio iba a estar como seis meses, pero se tuvo que acortar la estadía por financiamiento. Mi notebook con banderitas causó revuelo pero todos los días me insistían en que faltaba la más importante, así que finalmente compré el autoadhesivo en un mall que había. Durante esos dos meses hice mi tesis, aprendí portugués, trotaba al rededor de una lagunita artificial, hice cortinas con papel crepé, usé mi toalla de frazada, comí melancia, abacaaxí y la mejor empanada chilena del mundo. Fue como estar en un domingo quillonero de dos meses.

14.- Gales. Tomamos un tren desde Liverpool a una estación en las afueras del condado. No compré sticker en Liverpool porque ya tenía el de Londres (malas decisiones tomé muchas ese año). Como ya habíamos visto todo lo que queríamos, esa mañana decidimos tomar el tren más temprano de lo que realmente era necesario. Nunca hay que confiar, sin embargo, en Brittish Railways, la puntualidad inglesa es un mito tan grande como la existencia de dios. Tomamos el tren pero a mitad de camino quedamos botados porque algo se echó a perder. Estuvimos como una hora esperando en una estación aleatoria hasta que los ingleses coordinaron un bus de dos pisos que nos llevó con dos hrs de retraso a la estación donde teníamos que combinar con un segundo tren. El problema era que si perdíamos el segundo tren, quedábamos botados en la mitad de Inglaterra, sin dinero ni pasaje para volver al continente. Por suerte, el segundo tren también estaba atrasado un poco y, como tomamos el tren más temprano, alcanzamos a tomarlo. El viaje hasta Hollyhead (que así se llama el puerto que no recordaba) es bastante bonito. Se pasa por la estación con el nombre más largo del mundo, por un par de castillos y por verdes prados galeces llenos de ovejas. En Hollyhead compré el autoadhesivo con el dragón, que es la bandera de Gales, mientras esperábamos que nuestro ferry (atrasado por el mal tiempo) llegara con otras dos hrs de retraso.

15.- Teletón. Al volver a Conce, en noviembre o diciembre cooperé con la teletón y no tenía qué diablos hacer con el sticker. Así que lo dejé ahí afeando el notebook y desentonando.

16.- AMSTERDAM. Fuimos a Holanda en auto cuatro chilenos que no tenían hotel ni mucho dinero. El plan era dejar el auto en un estacionamiento que pillamos, pasar todo el día y toda la noche en la ciudad y volver a la mañana siguiente. Sólo puedo decir que con 50 euros se pasa una muy buena media hora y que tipo cuatro de la mañana ya no dábamos más (siempre nos pasaba lo mismo) y nos fuimos a la estación de trenes principal de la ciudad porque nos pareció el lugar más seguro para dormir en el piso un rato. El sticker lo compré en una tienda de souvenirs durante la tarde, mientras caminábamos entre los canales y los coffee shops, después de descubrir quen holandés día se dice dag y helado, eij. Ah! Si alguna vez hacen ese viaje, en la frontera con Alemania está lleno de policías que les van a registrar hasta los calzoncillos buscando marihuana. Especialmente si el chofer chileno decide estacionarse al lado de ellos para ir a regar un arbolito más allá. Por suerte nosotros éramos chicos sanos.

17.- CESKÁ REPUBLIKA. República Checa, o Chequia para los amigos. Praga (o Praha) es una ciudad hermosa, con castillos y palacios y puentes medievales sobre el Danubio. También tiene la disco más grande de Europa con como siete pisos y no sé cuántos ambientes. En vísperas de navidad, sin embargog, tiene dos problemas: Hace muchísimo frío y las discos están semivacías. Tal es el punto, que en la descrita disco, encontramos a otros chilenos... El autoadhesivo no sé específicamente dónde lo compré. Me parece que cuando estábamos saliendo hacia Bratislava...

20120723

Pitágoras

De la mónada solitaria
se desprende la dualidad infinita
lo limitado define lo abierto
y el alma existe eternamente en el instante
es la dualidad indefinida
sustrato material de lo unitario
como consecuencia de su causa
es el número la forma intangible
con la que se revela el universo
del número al punto
y del punto a la línea
de la recta al plano
luego al cuerpo
del cuerpo a la vida
y a los elementos que la conforman
estos no son sino cuatro
fuego, tierra, aire, agua
y se funden y se condensan todos
en las cosas que son así números
números inconmesurados y racionales
y armonías que los equilibran
son las leyes que gobiernan el movimiento
de la tierra y de los astros
y de la suma de las dimensiones
la perfección triangular de la decena
que no es sino una
unidad pitagórica primordial.